Becas y subvenciones en Coruña. Curso de pilates
El Pilates, esa disciplina entre la gimnasia y el yoga, que entrena nuestro cuerpo y nuestra mente, llegó a España hace unas décadas y lo hizo para quedarse. Pero a lo largo de los años, el pilates se ha ido perfeccionando, especializando y mejorando. Si alguna vez has practicado pilates, sabrás que, en un entrenamiento básico, no es necesario ningún aparato para desarrollar una sesión. Pero es cierto que añadir a las rutinas la ayuda de algún equipamiento favorece el ejercicio y permite trabajar zonas concretas del cuerpo. De hecho, el creador del método, el alemán Joseph Hubertus Pilates, diseñó aparatos especiales para trabajar con su sistema.
Aparatos para hacer pilates
Los aparatos tradicionales para realizar pilates, que son los diseñados por su creador, son: el reformador, similar a la máquina de remo que vemos en los gimnasios; el trapecio o cadillac, que utilia cuerdas y poleas para realizar ejercicios prácticamente en suspensión; la silla, que sirve principalmente para ejercitar las piernas; y el barril, una estructura con forma de un semicírculo, usado específicamente para estirar la columna vertebral.
Como decíamos anteriormente, estos aparatos han ido evolucionando con el paso de los años y se han creado otros nuevos que facilitan la realización de los ejercicios y sirven también para intensificar el trabajo en zonas determinadas del cuerpo como glúteos, espalda, abdominales… Uno de los ejemplos de creación y desarrollo de aparatos para pilates es Bonpilates.
La diferencia que marca Bonpilates respecto a otros competidores del sector es que sus diseños parten de las necesidades que detectan los propios practicantes de la disciplina. De hecho, según cuentan en su página web, fue el fundador de la empresa el que observó carencias en los aparatos que utilizaba en las clases de pilates que frecuentaba por problemas de salud. De la necesidad propia, nació la creación de aparatos mucho más evolucionados y más útiles de los que anteriormente se utilizaban.
Pero no te asustes. Esto no significa que debas acudir obligatoriamente a un gimnasio para utilizar este tipo de maquinaria y practicar un pilates adecuado. Existen aparatos más sencillos que te pueden ayudar a completar tus rutinas en casa. Bolas de pilates, pequeñas superficies de equilibrio, barras de espuma, los conocidos aros de pilates… Si echas un vistazo a Bonpilates te puedes hacer una idea del abanico de posibilidades que tienes para enriquecer tus clases de pilates.